La ministra de Educación en funciones, la socialista Isabel Celaá, ha causado un enorme revuelo durante su intervención en la inauguración del XV Congreso de Escuelas Católicas que reunirá hasta el sábado a más de 2.000 profesores, directores y educadores de centros cristianos de toda España.
De este modo, la política vasca volvió a atacar de nuevo a la escuela concertada y en esta ocasión lo ha hecho delante de sus responsables al negar la libertad de los padres para elegir la educación de sus hijos.
De hecho, afirmó que “de ninguna manera se puede decir que el derecho de los padres a escoger una enseñanza religiosa o elegir centro educativo podrían ser parte de la libertad de enseñanza” que emana del artículo 27 de la Constitución Española.